5 tips de los expertos para hablar en público
¿A qué es a lo que más le temes? Si eres como la mayoría de las personas, hablar en público te asusta más que las alturas, los insectos, las víboras, los espacios cerrados, volar, los extraños, los payasos e incluso la posibilidad de ahogarte; hoy Grupo Eudermic te comparte 5 tips de los expertos para lograrlo.
Y es que como emprendedor, lo más probable es que necesites acomodarte a la idea de hablar en público en algún nivel porque, después de todo, tendrás que pitchear tus ideas a los inversionistas; tendrás que cerrar tratos con tus clientes, incluso tendrás que pararte enfrente de otros emprendedores a hablar.
Afortunadamente, no estarás solo en esto: cientos de emprendedores y gurús de las charlas en público han superado sus miedos en el pasado y están dispuestos a compartir su conocimiento y los consejos que los han ayudado a ser exitosos.
1. Habla sobre lo que sabes que sabes
Dale Carnegie (1888-1955), el famoso autor de How to Win Friends and Influence Peopley fundador del Instituto Dale Carnegie, en el que hay un curso que enseña a hablar en público, animaba a la gente a hablar sobre temas de los que realmente saben. Más que eso, los animaba a hablar de temas de los que saben que saben mucho.
Hay muchos efectos positivos que notar aquí, pero el más importante y obvio es el boost de confianza que tienes al abordar un tema que conoces bien. No tienes que preocuparte por decir algo equivocado si estás seguro de que sabes las cosas correctas y tu vocabulario y anécdotas serán más diversos en un tema para el que estás bien preparado.
2. Habla tan lento que incluso se sienta extraño
Simon Sinek es, actualmente, uno de los presentadores de TED Talk más vistos de todos los tiempos, con más de 22 millones de video views, además es autor de Start With Why y Leaders Eat Last. Jamás te imaginarías que es un tipo tímido e introvertido. Pero también es un orador experto, y uno de sus mejores consejos es hablar despacio.
Muchos oradores terminan yéndose más rápido de lo que quisieran, por una combinación de nervios y el deseo de verse más dinámicos. Sin una pareja que dialogue con ellos y haga balance, no se dan cuenta de que tan rápido están hablando.
Hablar lentamente de manera deliberada hará que los que te escuchan pongan más atención y te hará ver más considerado y en control. También te da tiempo para pensar a futuro y evitar errores.
3. Habla a la parte trasera de la habitación
Jeannette Nelson, autora de The Voice Exercise Book y directora de voz en el Teatro Nacional, recomienda hablar a la parte de atrás de la habitación (o del espacio). Muchos oradores cometen el error de empezar con una voz muy fuerte que se proyecta bien, pero se va desvaneciendo gradualmente a lo largo de su discurso.
Al concentrarte en la parte de atrás de la habitación tendrás un punto de foco para que puedas mantener un volumen de voz constante a lo largo de toda tu presentación. Además asegurará que todos, desde la primera fila hasta la última, te escuchen claramente.
4. No imites el estilo de nadie
Puedes sentirte tentado por imitar el estilo del presentador de una buena conferencia, pero hacerlo puede resultar contraproducente. Nicola Sturgeon, primer ministro de Escocia y líder del Partido Nacional Escocés, es reconocida por su forma de hablar en público. Ella recomienda encontrar tu propio estilo y tu propia voz para usarla en tus presentaciones.
Si generalmente hablas muy bajito, puede que no funcione, pero seguramente podrás encontrar un estilo que le quede a tu personalidad y que tenga un buen sentido de liderazgo. En la mayoría de los casos, tratar de imitar el estilo de alguien más te hará ver como una copia barata, cuando tu propia personalidad es más que suficiente.
5. Deja que tu energía te empodere
Seguramente no hay una forma de eliminar por completo los nervios que sientes antes de una plática. Mientras te vas acostumbrando a hablar en público, esos nervios irán disminuyendo pero no se irán por completo. Gary Vaynerchuk, emprendedor y toda una personalidad en Internet, sugiere que la gente encuentre una forma de canalizar esa energía en su presentación, en lugar de dejar que los consuma.
Él es conocido por ponerse en un estado de alta adrenalina antes de subir al escenario para una presentación, casi como un boxeador antes de una pelea.
No tienes que obligarte a ti mismo a llegar a ese nivel de frenesí, pero deberías pensar en la energía de tus nervios de forma distinta: ésta es la forma que tiene tu cuerpo de prepararse para un reto, a través de la respuesta de lucha o huida. Usa esa energía como combustible para hacer una gran presentación.
Hablar en público, como cualquier otra habilidad, puede ser mejorada y refinada a través del entendimiento y la práctica. No hay una solución rápida para eliminar los nervios antes de una presentación, ni hay una estrategia que funcione para todo el mundo.
Todo lo que puedes hacer es aprender del consejo y la experiencia de la gente que lo ha hecho antes que tú y sigue trabajando para mejorar tus propias habilidades.
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